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Matéria do portal Nodal – Notícias da América Latina e Caribe, de 13/11/2014
A Marcha Patriótica, que foi lançada em julho de 2010 como uma plataforma para a qual confluíram organizações e movimentos sociais, deu um passo definitivo para se apresentar às urnas nas eleições regionais do próximo ano. Assim anunciaram seus representantes David Flórez e a ex-senadora Piedad Córdoba. A estratégia eleitoral do movimento inclui um plano de acordos programáticos com partidos e coletivos de esquerda. A notícia se dá enquanto se toma conhecimento de reuniões entre membros da Marcha e dirigentes do Polo Democrático, da Aliança Verde e da União Patriótica.
“Decidimos participar das eleições do próximo ano com dois propósitos: um, gerar um melhor clima político para o processo de paz entre o governo e as Farc (Forças Armadas Revolucionárias da Colômbia); e dois, transformar a forma de fazer política na Colômbia”, explicou Flórez. Sobre as alianças assinalou que a pesar de disputar com a identidade própria da Marcha Patriótica, consideram necessário construir alianças programáticas com organizações que coincidam com sua visão política. Uma visão que prioriza as organizações de base e as comunidades a partir de um ponto especialmente territorial.
A Marcha Patriótica, durante seus mais de quatro anos de existência, realizou um importante trabalho em regiões como o Catatumbo (norte de Santander), Arauca, Meta, Caquetá, Putumayo e Cauca. “O país se deu conta de que o poder da mobilização social da Marcha Patriótica reside nas regiões do oriente, do nordeste e do sul do país. Onde o movimento agrário, afro e indígena é forte temos feito um trabalho importante e seguro. Ali nossa participação eleitoral será muito positiva”, agregou Flórez, que se tornou conhecido como um dos ativistas da MANE (Mesa Ampla Nacional Estudantil) em 2010.
Continua em espanhol (com traduções pontuais):
Por su parte, la exsenadora Piedad Córdoba refirió que la idea de lanzarse a las urnas ha sido un fuerte debate interno en la Marcha. Un debate que se incrementó durante la contienda electoral de este año a la Presidencia. “Dentro de la Marcha se discutió fuertemente si apoyar a la Unión Patriótica en las elecciones a Congreso, otros pedían no participar en nada. Luego vino la campaña presidencial, en la que se decidió dejar en libertad a sus miembros. Estas fueron discusiones difíciles, que incluso causaron malestar en algunos miembros. Pero todo eso sirvió para iniciar un debate sobre la necesidad de que la movilización popular diera un paso a la política electoral”, señaló Córdoba.
Después, según Córdoba, vino la conciencia de que, como lo ha dicho el presidente Juan Manuel Santos, la paz se dará en lo territorial. “Eso nos hace pensar que tenemos que participar en las elecciones regionales. Porque es en los concejos municipales y en las asambleas departamentales (dos estados), en las alcaldías (prefeituras) y gobernaciones, donde se toman decisiones. Es en las regiones donde se viven los impactos de la política minero-energética, donde se vive el conflicto, donde se siente la mayor desigualdad, donde los movimientos de base están trabajando. Por todo eso decidimos participar del escenario electoral”, añadió (acrescentou) la dirigente de Poder Ciudadano, una de las organizaciones que hacen parte de la Marcha Patriótica.
Córdoba concluyó explicando que se decidió crear un comité electoral que se encargará de levantar una topografía sobre las regiones donde la Marcha tiene presencia y posibilidades electorales. De igual manera, está encargada de adelantar una campaña de cedulación (registro eleitoral) e inscripción de cédulas de muchos de sus militantes que nunca han participado en política. También, se creó un comité de ética que se encargará de buscar los perfiles de los candidatos propios de la Marcha y de aquellos que pertenezcan (pertençam) a otras colectividades y que por sus banderas políticas permitan llegar a acuerdos programáticos.
Al finalizar la rueda de prensa (entrevista coletiva), Córdoba denunció que sabe de un plan para matarla a ella, así como a Carlos Lozano y a Pastor Alape, miembro de la delegación de paz de las Farc en La Habana. “Sabemos que sectores militaristas, empresariales — nacionales y extranjeros — y de la ultraderecha latinoamericana buscan atentar contra el proceso de paz asesinando a uno de nosotros. Y si me llegan a matar sólo pido que la paz se firme, sólo quiero que los negociadores no se levanten de la mesa hasta firmar un acuerdo final. Ese sería el mejor homenaje”, concluyó la exsenadora.
Tradução (parcial): Jadson Oliveira
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